En el umbral de la infancia II

Hay que distinguir con toda claridad el umbral del límite. El umbral es una zona. El término schwellen (situarse en el umbral) implica cambio, transición, flujos […]

W. Benjamin

 

I

El papá de Lilus no puede comprenderla cuando ella se queda horas mirando a un gatito jugar con su cola, a una gota de rocío resbalar sobre una hoja. Lilus sabe por qué las piedras quieren estar solas… Sabe cuando va a llover porque el cielo está sin horizontes, compasivo. Ha tomado entre sus manos pájaros calientes y puesto plumas tibias en sus nidos. Es diáfana y alegre. Un día tuvo una luciérnaga y se pasó toda la noche con ella, preguntándole cómo encerraba la luz… Ha caminado descalza por la hierba fría y sobre el musgo, dando saltos, riendo y cantando de pura felicidad. El papá de Lilus nunca camina descalzo…Tiene demasiadas citas. Construye su vida como casa, llena de actos y decisiones. Hace un programa para cada día, y pretende sujetar a Lilus dentro de un orden riguroso. A Lilus le da angustia…

“No hacer nada” en Lilus Kikus (1954) de Elena Poniatowska

 

II

Mi capítulo con los caballos terminó mal: cuando tuve que partir a la secundaria [internado], mi padre mandó a Khalifa y Fleet a una granja donde, aparentemente, molestaban al ganado de un inquilino. El vaquero éste llamó una noche a casa y, con una persuasión campechana que podría encantar hasta a una culebra para meterse en una cortadora de pasto, convenció a mi padre de darle los caballos para montarlos. Una semana después, mandó a la yegua al matadero. Cuando descubrimos lo que había pasado, fui a rescatar de su mala fortuna a mi pequeño y fino alazán Khalifa antes de que, cual Azabache, fuera de un comerciante en otro para terminar, como la yegua, en comida para perros.

Hold Still (2015) de Sally Mann

III

Nota de la investigación: “Lilus Kikus” constituye el punto de partida para la reflexión sobre la transición de la niñez a la adultez en las niñas, así como la investigación de la interacciones entre literatura y fotografía desde una perspectiva anacrónica y de género que genera una práctica fotográfica personal en torno al tema. Desde este punto de vista, Lilus puede ser una y todas las niñas, puede ser Lilus, Sally, Azul, Paz, Tania, Alma, Mora, Luli, Magda… Memoria, fotografía, ficción, documento, un olvido, la imagen de una experiencia –o muchas– que retorna bajo diferentes rostros.

Texto del video: Idea Vilariño a los 13 años, 1934.

 

 

 

 

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