- Sin título, 2010. Foto: Martín Canova
- La archidama, c.1984. De la serie La cinta de Moebius. Foto: Mario Schettini
- De la serie Hum, 2017. Foto: Andrés Boero Madrid
- Joaquín, 2000. Foto: Mercedes Xavier
- Paso Garúa, Canelones, 1986. Foto: Guillermo Robles
- Instituto nacional de rehabilitación, Unidad N° 5, Cárcel de mujeres. Montevideo, 2014. Foto: Alessandro Maradei
- Silvia Elizabeth Moreira Martinez (1976-2012), Las Piedras, Canelones, 2017. De la serieToco tu piel, mujeres asesinadas por hombres con quienes tenían una relación‚ o no la querían tener más. Foto: Manuela Aldabe
- Tomás Urruzola, hijo del fotógrafo, con su madre Beatriz Abdala, 2010. De la serie Chau Bea. Foto: Juan Ángel Urruzola
- De la serie Interiores de mi familia, 2015. Foto: Irina Raffo
- Exposición rural del Prado, Montevideo, 2013. De la serie Habitus. Foto: Javier Calvelo
- Fábrica de chocolate Águila Saint, Montevideo, 2000. De la serie El estado del tiempo. Foto: Luis Alonso
- Celda de Jorge Tiscornia, Penal de Libertad, 1985. Foto: Jorge Tiscornia
Del 24 de noviembre de 2017 al 28 de enero de 2018
Museo Nacional de Artes Visuales
Autores: Javier Calvelo, Luis Alonso, Guillermo Robles, Mario Schettini, Jorge Tiscornia, Andrés Boero Madrid, Mercedes Xavier, Martín Canova, Irina Raffo, Manuela Aldabe, Juan Ángel Urruzola, Alessandro Maradei
Con la curaduría de Ricardo Antúnez –fotógrafo y docente invitado por MUFF para estudiar un corte transversal de la producción fotográfica uruguaya– la exposición Mirada Interna propone una reflexión acerca de la relación entre fotografía, conocimiento colectivo y debate público.
La idea de fotografiar a un nosotros para reconocernos y guardar la memoria de cómo éramos, de lo que nos fue ocurriendo a lo largo del tiempo, con la esperanza de que las fotos sirvan para contárselo a otros por venir o para algo más inmediato: participar en el debate público de asuntos que en el presente nos conciernen como comunidad, es toda una toma de posición. Delimita un vasto campo de trabajo y posibilidades para la fotografía en la dirección de quien busca en lo que pasa a su alrededor, más allá de su vida personal.
En la fotografía uruguaya de los últimos años, esa mirada convive con la de quienes se orientan hacia su vida privada. Pero el interior de mi casa, mis viajes, lo que hago con mis amigos o la enfermedad que golpea a mi familia, ¿por qué serían un asunto publicable, la materia misma de un trabajo documental y estético destinado a exhibirse?
Puestas a circular en un espacio público, las imágenes de vidas privadas, ¿qué importancia tendrían si no pudiéramos ver más allá de ellas? No importan por su particularidad sino como vías de acceso a universos que las exceden o a experiencias comunes que nos alcanzan también a nosotros, espectadores. La pregunta es ¿cuáles serían las buenas razones para mostrar esas fotos? ¿Podrían ser importantes para otros? ¿Pueden llevar hasta otros una experiencia que amplíe su conocimiento?
Ricardo Antúnez / Curador invitado